¿Cómo se descafeína el café?

La descafeinización del café se realiza sobre el café verde, es decir, antes de ser tostado. Existen dos métodos principales para realizarla, el químico y el natural, ambos tienen el mismo propósito, eliminar el 96-99% de la cafeína total.
¿Es posible descafeinar el café en casa?

El café descafeinado está dirigido a los consumidores que quieren disfrutar del sabor y el aroma del café sin sentir los efectos de la cafeína. El proceso de descafeinización se caracteriza por no hacer perder al café sabor y aroma, pues se realiza antes del tostado y es en él cuando el café crea las más de 700 moléculas que le confieren su característico sabor y aroma.

La técnica existe desde principios del siglo XIX gracias a un químico alemán llamado Friedrich Ferdinand Runge, quien además de la técnica de descafeinización, descubrió la cafeína. La comercialización de café descafeinado tuvo que esperar unas décadas, para realizarse por primera vez en 1906.

Actualmente el proceso más utilizado en la industria es la descafeinización por cloruro de metileno sobre café arabica (debido a su bajo contenido en cafeína). Los cafés de gran calidad suelen utilizar el método de descafeinización por dióxido de carbono y agua.

Descafeinización química:

Se trata de un proceso en el que se utilizan disolventes. El más común es el cloruro de metileno que aparentemente no es dañino para la salud, pues se evapora a 40 grados haciendo que sea fácil eliminarlo casi por completo del café apto para consumir. Aunque existen algunos estudios que indican tímidamente que puede aumentar la probabilidad de padecer cáncer, la toxicidad de este compuesto para nuestro organismo es 8 veces menor que la toxicidad de la cafeína.

El proceso es el siguiente: los granos de café verde se cuecen al vapor para abrir poros en ellos y aumentar su tamaño, posteriormente se añade el cloruro de metileno para eliminar la cafeína de ellos. Tras esto, los granos se vuelven a cocer, esta vez en agua, para eliminar el disolvente casi por completo.

Posteriormente se separa la cafeína del disolvente para emplearse la elaboración de fármacos, cremas cosméticas y refrescos.

Por supuesto, todos los cafés que han sufrido este proceso no podrán llevar la etiqueta de orgánico o descafeinado natural.

Descafeinización natural:

Aunque su nombre da a entender que es un proceso rudimentario, se trata de un proceso químico costoso en el que se requieren instalaciones de alta tecnología y elevado precio. El apellido “natural” viene de que en este tipo de descafeinización no se emplean disolventes ni compuestos químicos artificiales, únicamente es necesario dióxido de carbono y agua.

El proceso comienza igual que el anterior, sometiendo a los granos de café verde a una cocción al vapor. Posteriormente, son sometidos a una circulación de dióxido de carbono a alta presión que “naturalmente” extrae la cafeína de los granos de café verde.

Las ventajas evidente de este método son evidentes, no emplea disolventes químicos y conserva mejor las cualidades del café. Además, el reciclaje de la cafeína es más simple de este modo. Solo los cafés descafeinados por este método podrán llevar la etiqueta de certificación orgánica.

¿Podemos descafeinar el café en casa?

No es una buena idea descafeinar el café en casa. Podemos hacerlo al igual que con el té (véase este artículo) , en el que tras una rápida infusión, la segunda infusión tenía mucha menos cafeína. En el caso del café, las diferencia de sabor será mucho más notoria que en el té, por lo que no vale la pena intentarlo, además de que sería una descafeinización incompleta ya que contendría mucha más cafeína que un café descafeinado corriente.

Mucha gente opina que tomar café descafeinado es como tomar cerveza sin alcohol, pierde la gracia. Esto es cierto, pero también es cierto que existe muchísima gente que no tolera bien la cafeína o que por consejos médicos no debe consumirla. Gracias a la descafeinización todo el mundo puede disfrutar del sabor y el aroma de un buen café.